Es difícil decir lo que quiero decir
es penoso negar lo que quiero negar

mejor no lo digo
mejor no lo niego.

Mario Benedetti. "EL PUSILÁNIME",
de "El olvido está lleno de memoria".

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jueves, 8 de julio de 2010

280

No no no no.

Decididamente, sólo quien ha pasado por una oposición LO SABE.

Sólo quien ha sufrido un tribunal que sin duda es muuuuucho peor que la mismísima Inquisición, quien ha sobrevivido a una hora de encerrona en Murcia sin aire acondicionado, sin el tema preparado ni la garantía de llevar una indumentaria adecuada, puede disfrutar del privilegio de volver a nacer.

Puede paladear un café, perder la mirada en el infinito sin remordimiento, dedicarse al deleite de la espiración interminable, de los nervios diluyéndose estomacalmente, y salir a pisar la calle para, por cierto, comprobar que en pleno éxodo playero en la ciudad ya no queda nadie.

Sólo quien ha opositado, (y si añadimos a eso un máster insufrible y caótico, con aún más razón) puede permitirse el lujo de sentirse ganador aún en la más ridícula de las derrotas. Aunque ahora se abra un foso mucho más peligroso, y más negro, de lo que haya visto antes.

Ahora tengo que decidir qué voy a hacer con mi vida estos dos años en blanco hasta la siguiente oposición.

Pero eso será mañana.

Hoy, la opositora 280... por fin deja de serlo.


sábado, 3 de julio de 2010

Recortables de nuestra vida


En resumidas cuentas, éste ha sido mi Trabajo Fin de Máster, que me ha valido un 9,3 ante un exigente? tribunal.

Para mayor información, pueden ustedes acceder a la soporífera redacción del estudio del marco legal (derogado y en vigor) sobre la situación actual del aula de Educación Plástica y Visual y sus requisitos mínimos; de las referencias a materiales y técnicas dentro del currículo autonómico y nacional, y el estudio del Código Técnico de la Edificación y la ratio adecuada para garantizar la calidad de la enseñanza ¬¬.
Osea, a mi trabajo Fin de Máster, donde sin duda lo que más me gusta es la palabra
FIN.

jueves, 6 de mayo de 2010

Mi primera vez

Apago el despertador a las 7 de la mañana y vacío literalmente el armario buscando esa combinación perfecta que le de un aire fresco, pero serio, a este fardo de nervios que hoy va a enfrentarse a un aula por primera vez. Escojo chaqueta negra y camisa blanca, pelo suelto y bailarinas.

Llevo en el bolso un power point que he tardado dios días en terminar, cuidando cada detalle hasta rozar lo enfermizo, misma localización del encabezado en cada página para no generar desconcierto visual, mismo esquema a la izquierda con las paradas explicativas que tiene programado este tren al que tanto temo, texto mascado con el lenguaje más llano y las imágenes más claras para cuatro 1ºESO que van a hacer historia, sin saberlo, en mi anónima vida. Incluso lo guardo en pdf, no habrá ordenador del mundo que me ponga pegas hoy.

Cargo como una mula con portátil y miles de círculos de colores en cartulina, de acetatos y flechitas con los que explicar empíricamente la síntesis sustractiva, todo recurso es poco para descubrir el color, sus propiedades, funcionamiento y relaciones. Todo está tan claro en mi mente, todo queda tan claro en mi powerpoint, que dar clase no puede ser tan difícil.

Y llego al aula y no hay cañón, ni proyector, ni cables. Llego al aula y ni siqueira hay tizas de colores, y el tutor se sienta y me mira sin decir nada, y de repente me doy cuenta de que no soy nadie, de que no soy nada, y que al final lo único que queda es ser valiente, y coger la tiza y no tener temor a equivocarte, una y otra vez, que no hay más certeza que saber que siempre lo puedes hacer mejor, tener la certeza de que no lo has podido hacer mejor, y esforzarte para que, quizá el día antes de jubilarte, hayas aprendido lo bastante para poder dar una clase de la que sentirse satisfecha.

Pero al profesor le ha encantado mi esquema del prisma que se transforma de repente en gota de agua, y llena la pizarra de arcoiris. Dice que me lo va copiar. No está mal para un largo, intenso y muy difícil, primer día.

Primer día de lo que (siempre lo he sabido) quiero que sea el resto de mi vida.

viernes, 18 de diciembre de 2009

Despegando!

Alumnos de Educación Plástica y Visual, y Dibujo técnico I y II del IES Infante Don Juan Manuel, desenfundad lápiz y regla, que esta humilde servidora va ser presto vuestra profesora en prácticas! ;)

martes, 24 de noviembre de 2009

"Aprender a enseñar" y demás palabrerías

Como sabréis los que me conocéis (y los que no, vais a saberlo ahora), me encuentro inmersa en un Máster en formación del Profesorado de Secundaria, (entre otras cosas)que tiene como objetivo enseñarnos todas las teorías claramente útiles (léease no sin cierto ecepticismo) que nos harán ser supermanes capaces de combatir el mal en las aulas y educar a los ineducables, sin dejar por ello de enseñar la materia (en la que por tener el título somos ya claramente duchos expertos) y convirtiéndonos a la misma vez en referente de esos chicos y modelo a seguir, por supuesto, sin ayuda de las instituciones, y con la cada vez más creciente sombra de la inspección.

Entré a este Máster con muchísima vocación, realmente he querido ser profesora toda la vida. Elegí Bellas Artes por considerar Plastica Visual una materia preciosa para impartir en un instituto, fomentando la comunicación, la diversión, la motivación, la integración y la expresión en el aula, generando un contexto, así como momentos propicios (paralelos al currículo, por supuesto, sin faltar nunca al Real Decreto de las enseñanzas mínimas ¬¬ ) para debatir y poner un granito de arena en las conciencias aún sin formar, pero ya tan apaleadas, que traen de casa los adolescentes.

Pero cada día se me hace más cuesta arriba caminar con tanta zancadilla.No soporto la pscicopedagogía, no es real. No soporto tanta exigencia sin tener los medios para poder acercarme a las expectativas puestas en ella. Sólo de pensar todo lo que tengo que hacer para no faltar a mi deber (tan profusamente recogido en la ley), como a mi conciencia como profesional humanista, me hacen cagarme de miedo antes de entrar al aula (cosa que olerán los chicos ya en el primer moemnto y derivará en un comportamiento desobediente e irrespetuoso el resto del curso). Aún daré gracias de que me sea virtualmente imposible sacar plaza!!!!



Por lo demás...¿¿¿Alguna sugerencia para acabar con esta situación educativa???Por lo pronto, me quedo con la economía de fichas y el carnet por puntos, a ver si al menos la competitivad se pone de mi parte en el aula.