Por aquel entonces me compadecías, ¿te acuerdas?
“Pobrecilla, me da pena, nunca será feliz”.
Supongo que todavía creías que tú sí.
Es difícil decir lo que quiero decir
es penoso negar lo que quiero negar
mejor no lo digo
mejor no lo niego.
Mario Benedetti. "EL PUSILÁNIME",
de "El olvido está lleno de memoria".
Etiquetas
ABOUT LIVING IN IRELAND
(3)
AGOBIO
(7)
AIRES DE BRASIL
(3)
AMAPOLA PRE-PSICOVISCERAL
(10)
AMAPOLACIONES
(5)
AMIGOS
(33)
AMOR EN TIEMPO REAL
(1)
ARCADIAS
(18)
BANDA SONORA
(51)
CANCIÓN PROPIA
(3)
CANCIONES
(37)
CARNE TRÉMULA
(9)
CUENTOS
(20)
CUERPO
(10)
DOCENCIA
(6)
ELLA
(7)
ERRORES SIN MARCHA ATRÁS
(6)
ESCOCIA
(1)
ESTA ESPERA LARGA
(2)
ESTOPA
(1)
EX
(26)
FAMILIA
(11)
FLOR DE AGUA
(19)
FRASES CÉLEBRES
(16)
GRACIAS
(6)
HISTORIADEUNPUNTO
(2)
HISTORIAS DEL MUÉRDAGO
(9)
HISTORIAS DEL NO QUERERSE
(11)
HOMBRES...
(217)
HOMENAJE A UN ÍDOLO
(49)
IMÁGENES
(49)
INFORMACIÓN
(3)
INTRODUCCIÓN
(1)
JUAS JUAS
(22)
JUVENTUD DIVINO TESORO
(1)
LO QUE NO MATA MUERE
(11)
MALDITA DULZURA LA TUYA
(4)
ME GUSTAS...
(24)
MENTIRAS
(15)
METAESCRITURAS
(5)
MORALEJA
(6)
MUNDO MARAVILLOSO
(10)
MURCIA
(6)
NARANJA
(1)
OJOS DE PERRO AZUL
(7)
PÁJAROS
(28)
PALABRAS PRESTADAS
(50)
PANDORA
(43)
PAREDÓN LÁCTEO
(1)
PAREJA-DAS
(30)
POEMAS
(163)
PREMIOS
(4)
RE-VERSIONES
(3)
RECOMENDACIONES
(8)
REFLEXIONES PRE-Y-NOCTURNAS
(194)
SONIDO E ILUMINACIÓN
(6)
TE EXTRAÑO...
(37)
TU PELO LARGO
(17)
UNA HISTORIA QUE NO VA A INTERESARLE A NADIE
(2)
VIAJES
(5)
VIDEO(ARTE)
(6)
YO
(162)
Encuentra lo que buscas en este blog:
Mostrando entradas con la etiqueta LO QUE NO MATA MUERE. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta LO QUE NO MATA MUERE. Mostrar todas las entradas
sábado, 9 de abril de 2011
martes, 21 de abril de 2009
Cinco minutos
Necesito dedicarte cinco minutos de rigor cada día, reencontrarme con la espina que me ha quedado justo debajo de la costilla menos oportuna. Ya sabes de cuál hablo.
Lo necesito; es altamente recomendable odiarte un poquito cada día, maldecir tu suerte y la mía, y el punto donde se encontraron. Acto seguido siempre respirar, respirar muy profundo, y ver que el aire es doblemente suave, y dar las gracias porque ahora todo lo bueno sabe el doble de dulce. Tú lo has hecho posible, estando primero, y luego yéndote. De no haber aparecido nada de esto sería posible; de no haber aparecido ahora seguiría soñando con monstruos como tú. A los cinco minutos puedo matarte, y enterrarte, y sonreír en tu tumba, y no volver a saber de ti hasta los cinco minutos de rigor del día próximo.
Temo el día que no te piense. Temo el día en que me acostumbre a no agradecer la inmensa suerte de que todo me vaya así de bien. Así que forzaré mi cal y mi arena, y así podré acudir a mi nuevo par de brazos, llena de ilusión, y de esperanza, y de paz, y de agradecimiento, y de amor, para encontrar en ellos exactamente lo mismo, cada nuevo día.
Lo necesito; es altamente recomendable odiarte un poquito cada día, maldecir tu suerte y la mía, y el punto donde se encontraron. Acto seguido siempre respirar, respirar muy profundo, y ver que el aire es doblemente suave, y dar las gracias porque ahora todo lo bueno sabe el doble de dulce. Tú lo has hecho posible, estando primero, y luego yéndote. De no haber aparecido nada de esto sería posible; de no haber aparecido ahora seguiría soñando con monstruos como tú. A los cinco minutos puedo matarte, y enterrarte, y sonreír en tu tumba, y no volver a saber de ti hasta los cinco minutos de rigor del día próximo.
Temo el día que no te piense. Temo el día en que me acostumbre a no agradecer la inmensa suerte de que todo me vaya así de bien. Así que forzaré mi cal y mi arena, y así podré acudir a mi nuevo par de brazos, llena de ilusión, y de esperanza, y de paz, y de agradecimiento, y de amor, para encontrar en ellos exactamente lo mismo, cada nuevo día.
lunes, 29 de septiembre de 2008
Estarás contento...
Estarás contento...
Puedo borrarte de mi casa. Puedo borrarte de mi vida. Puedo cortar en cuadraditos todas tus fotos, y tus postales, y tus cartas.
Pero no doy a basto para limpiar todas las partes de la ciudad que has ensuciado. Se me hace cuesta arriba tomarme ese trabajo. A veces creo que es mejor dejarla ahí, convivir con ella.
Al fin y al cabo es sólo suciedad. Al fin y al cabo ya no me haces daño.
Puedo borrarte de mi casa. Puedo borrarte de mi vida. Puedo cortar en cuadraditos todas tus fotos, y tus postales, y tus cartas.
Pero no doy a basto para limpiar todas las partes de la ciudad que has ensuciado. Se me hace cuesta arriba tomarme ese trabajo. A veces creo que es mejor dejarla ahí, convivir con ella.
Al fin y al cabo es sólo suciedad. Al fin y al cabo ya no me haces daño.
Quién lo hubiera dicho. Ahora me alegro de que nunca me llevaras a bailar.
Así puedo hacerlo sin pensar en ti, cada vez que quiera....
lunes, 22 de septiembre de 2008
Feliz por vivir de nuevo..
Quién lo hubiera dicho, encontré finalmente la medicina a todos los males que llevan tu nombre. Y lo más gracioso es que la receta me la diste tú.
Te borré. Y me encuentro de un humor increíble, río a todas horas, me siento feliiiiz, soy libre de nuevo y empiezo a ser yo otra vez......
Se fue tu fantasma y sale de nuevo el Sol, con mucha más fuerza, pues sobreviví, y aprendí.
Ahora de recuerdo sólo queda el presente de una bruja amiga a la que a partir de ahora escribiré sólo por email. Cuestión de elegancia.... :)
Te borré. Y me encuentro de un humor increíble, río a todas horas, me siento feliiiiz, soy libre de nuevo y empiezo a ser yo otra vez......
Se fue tu fantasma y sale de nuevo el Sol, con mucha más fuerza, pues sobreviví, y aprendí.
Ahora de recuerdo sólo queda el presente de una bruja amiga a la que a partir de ahora escribiré sólo por email. Cuestión de elegancia.... :)
sábado, 20 de septiembre de 2008
Niño malo, niña mala, niña idiota
Perdoné todas tus mierdas, y nunca mejor dicho, porque pensaba que venían con el lote, que tú eras así y así tenía que aceptarte. Viví en el sótano durante muchos días, sólo porque ocasionalmente venías a buscarme para subirme arriba a pasar la noche, porque ese día estabas de buen humor.
Y aún así me compensaba.
Y ahora descubro que a parte de frío y egoísta, eres cínico y mentiroso. Que no sé cuántas alcobas has visitado antes y después de perjurarme que jamás habías sentido esto por nadie, que nadie como yo para ser la madre de tus hijos. Me vendes por un rato de sexo, y además, ya conocido.
Y te ves descubierto y lo único que tienes que decir es que te borre de mi vida, porque tú piensas hacer lo mismo.
Borrar. Como si fuera una prófuga, como si te hubiera maltratado, como si sólo te hubiera traído mal. Borrarte de mi vida es lo único que quiero, porque conocerte, y amarte, (y créeme si te digo que es la primera vez que pienso esto en toda mi vida) hace que me arrepienta como de nada que haya hecho nunca.
Sólo extraigo una cosa positiva de que te cruzaras por mi camino, y ha sido conocer los cádaveres que has dejado a tu paso, descubrir que fui tonta, pero que hay otras tontas como yo que preferimos llamarnos de otra forma. Lo mejor ha sido descubrir que la chica a la que cambiaste por mí, y a la que aún visitas, comparte mi forma de respirar, mis piernas con difícil depilación, que me encanta su forma de vivir, su forma de usar el verbo, aunque tanto yo como ella sepamos que está destinada a ser infeliz siempre. Porque se quiere muy poco. Y yo, gracias a ella, apoyándome en su dolor, que es el mío, viendo su forma indigna de amar, que tan parecida es a la que vengo usando muchos años ya, la tomaré como ejemplo de lo que no s e debe hacer, y cambiaré. Deseando con todas mis fierzas que ella también lo haga.
Y que algún día pueda ser feliz, dejar de ser la niña mala, la bruja, dejar de buscar niños, y encontrar un hombre. Que no la ate a la cama. Que no le regale las sobras.
Y yo sé que ella puede, porque es puro corazón.
Hazlo por mí, y por ti.
Y aún así me compensaba.
Y ahora descubro que a parte de frío y egoísta, eres cínico y mentiroso. Que no sé cuántas alcobas has visitado antes y después de perjurarme que jamás habías sentido esto por nadie, que nadie como yo para ser la madre de tus hijos. Me vendes por un rato de sexo, y además, ya conocido.
Y te ves descubierto y lo único que tienes que decir es que te borre de mi vida, porque tú piensas hacer lo mismo.
Borrar. Como si fuera una prófuga, como si te hubiera maltratado, como si sólo te hubiera traído mal. Borrarte de mi vida es lo único que quiero, porque conocerte, y amarte, (y créeme si te digo que es la primera vez que pienso esto en toda mi vida) hace que me arrepienta como de nada que haya hecho nunca.
Sólo extraigo una cosa positiva de que te cruzaras por mi camino, y ha sido conocer los cádaveres que has dejado a tu paso, descubrir que fui tonta, pero que hay otras tontas como yo que preferimos llamarnos de otra forma. Lo mejor ha sido descubrir que la chica a la que cambiaste por mí, y a la que aún visitas, comparte mi forma de respirar, mis piernas con difícil depilación, que me encanta su forma de vivir, su forma de usar el verbo, aunque tanto yo como ella sepamos que está destinada a ser infeliz siempre. Porque se quiere muy poco. Y yo, gracias a ella, apoyándome en su dolor, que es el mío, viendo su forma indigna de amar, que tan parecida es a la que vengo usando muchos años ya, la tomaré como ejemplo de lo que no s e debe hacer, y cambiaré. Deseando con todas mis fierzas que ella también lo haga.
Y que algún día pueda ser feliz, dejar de ser la niña mala, la bruja, dejar de buscar niños, y encontrar un hombre. Que no la ate a la cama. Que no le regale las sobras.
Y yo sé que ella puede, porque es puro corazón.
Hazlo por mí, y por ti.
Psico-vísceras......
ELLA,
HOMBRES...,
LO QUE NO MATA MUERE
domingo, 7 de septiembre de 2008
Cayó la venda....
La verdad es que antes o después todos estudiamos las partes que tiene el ojo, si bien yo no las recuerdo todas. La córnea, el cristalino, el iris, la pupila.... Y esa estúpida venda que nos solemos colocar, y que con su desprendimiento desencadena multitud de reacciones imprevisibles, como las fichas de dominó, que al caer se empujan las unas a las otras, acabando todas en el suelo.
Y a mí se me cayó la venda finalmente, y lo que antes eran sombras borrosas a las que no daba importancia, ahora se muestran claras y evidentes. Y ahora es cuando me siento idiota, cuando comprendo cómo perdí el tiempo, cómo malgasté mi amor contigo, como todo cayó en saco roto, y la fuga que hay en él ha impedido que conserve nada.
Cae la venda y descubro que eres sólo palabras huecas, silencios llenos de carencias, de complejos, que todo tú estás hueco y carcomido.
Descubro que no eres nada a mi lado, que no mereces ni el tiempo que dedico en odiarte. Porque yo te amé. Porque yo lo aposté todo. Y ahora comprendo que quien se enfenta a quien controla la estadística siempre va a tener las de perder en este juego. Y yo he perdido. He perdido mis sueños, he perdido mi fe. Pero tú, sin saberlo, has perdido muuuucho más. Me has perdido a mí...
Y más que perderás, porque eres un maldito cáncer que entra con sonrisas dentro de las almas, pero que acaba infectándolas, como infectado estás tú. Y sólo me consuela saber que nunca serás feliz, que eres el rey Midas en persona y así acabarás.
Porque la vida te devuelve lo que tú le das.
Y tú no le das nada.
Y hoy, por suerte, te veo por primera vez.
Y ya no tengo venda...
Y a mí se me cayó la venda finalmente, y lo que antes eran sombras borrosas a las que no daba importancia, ahora se muestran claras y evidentes. Y ahora es cuando me siento idiota, cuando comprendo cómo perdí el tiempo, cómo malgasté mi amor contigo, como todo cayó en saco roto, y la fuga que hay en él ha impedido que conserve nada.
Cae la venda y descubro que eres sólo palabras huecas, silencios llenos de carencias, de complejos, que todo tú estás hueco y carcomido.
Descubro que no eres nada a mi lado, que no mereces ni el tiempo que dedico en odiarte. Porque yo te amé. Porque yo lo aposté todo. Y ahora comprendo que quien se enfenta a quien controla la estadística siempre va a tener las de perder en este juego. Y yo he perdido. He perdido mis sueños, he perdido mi fe. Pero tú, sin saberlo, has perdido muuuucho más. Me has perdido a mí...
Y más que perderás, porque eres un maldito cáncer que entra con sonrisas dentro de las almas, pero que acaba infectándolas, como infectado estás tú. Y sólo me consuela saber que nunca serás feliz, que eres el rey Midas en persona y así acabarás.
Porque la vida te devuelve lo que tú le das.
Y tú no le das nada.
Y hoy, por suerte, te veo por primera vez.
Y ya no tengo venda...
Miedo
Me da pánico que te plantes frente a mí e intentes tocarme, que me beses como si no pasara nada. Tengo miedo de que juegues a que nada ha cambiado, a que no me has partido el corazón, a que sigues siendo el mismo para mí.
Me estremezco al pensar que tus manos rocen mi piel, y que yo no tenga el valor de apartarlas, que no tenga el coraje para decirte que ya no siento nada si me tocas. Porque sí lo siento. Pero es nuevo. Es dulce y amargo a la par, es querido y odiado a una misma vez.
Porque me has hecho mucho daño, y creo que ya no te quiero.
Que ya no te quiero...
Me estremezco al pensar que tus manos rocen mi piel, y que yo no tenga el valor de apartarlas, que no tenga el coraje para decirte que ya no siento nada si me tocas. Porque sí lo siento. Pero es nuevo. Es dulce y amargo a la par, es querido y odiado a una misma vez.
Porque me has hecho mucho daño, y creo que ya no te quiero.
Que ya no te quiero...
jueves, 4 de septiembre de 2008
¿Será verdad?
Hoy me he levantado, he desayunado, incluso he estudiado un poco. Fui con mis padres a comer, llevo toda la tarde enganchada a esta maldita serie, y esta noche saldré con mis amigas.
Va a ser verdad eso que dicen todos, eso de que no te necesito para vivir.
Va a ser verdad eso que dicen todos, eso de que no te necesito para vivir.
De paredes y cuadros
Hoy me he propuesto limpiar de sangre el trozo de pared mugrienta donde siempre me pego cabezazos. Detergente antirecuerdos, spray atrapasueños. Y maldita la tarea y el día en que tuve la idea de llevarla acabo, porque la sangre seca no salta. Me he destrozado los nudillos frotando con el gotelé postizo. He manchado los sitios donde había conseguido no gotear todas las otras veces. Y la sangre no salta. Imposible borrar todo, hacer que desparezca. Forma ya parte de la pared, forma ya parte de mí, y de lo mío.
Pero he decidido no venirme abajo por eso, es sólo un problema de última hora y le he encontrado solución. Porque soy pintora y tú lo sabes. Así que voy a pintar un cuadro hermoso, donde se cumpla todo lo que quiero, donde no exista nada de lo que huyo, un cuadro que lleve los colores de los sueños y las promesas del comienzo. Y pienso colocarlo justo encima de esa sangre ya negra, y no volveré a verla, y no volveré a pensar en ella. Nunca, nunca, nunca.
Y no golpearé más mi frente contra las paredes.
Y aprenderé a madurar, y a luchar cuando tenga que luchar, pero también a resignarme cuando tenga que hacerlo, pues es algo que nunca se me dio muy bien.
Y bueno.... me resignaré a vivir sabiendo que esa mancha, por mucho que la tape, sigue ahí. Hasta que un día me levante y descubra que ya no me importa.
Que ya no me importas.
miércoles, 3 de septiembre de 2008
Distinguir una mentira....
Maldita sea, ¿es que no sabes distinguir una verdad de una llamada clara de atención???????
Por supuesto que no quiero que te marches, lo que quiero es que claves tus ojos en los míos, que pegues tus manos a mis manos, que te sientes a mi lado y ya no te muevas nunca, que olvides aquello que tanto anhelabas y lo transmutes en un anhelo nuevo donde yo estoy en el centro de todo, como una diosa, y que me digas que sin mí todo te sabe amargo, y que encima de decirlo, lo pienses.....
Por supuesto que no quiero que te marches. Lo que quiero es temblar contigo, lo que quiero es dormir entre tus brazos, vivir entre tus piernas, mirar donde tu mires y descubrir que es a mí a quien estás mirando. Dejar de sentirme miserable, dejar de sentirme huérfana, perdonarte todo, empezar de cero, creer que puedes ser como yo quiero que seas. Aunque no lo seas.
Y no me canso de ser indigna. Ojalá pudiera serlo cada día, ojalá no se me hubieran secado ya los ojos, ojalá aún me quedaran uñas pa' morderme, ojalá no hubiera gastado ya todas las palabras en decirte lo que no te he dicho, aunque ya lo hayas oído, de mi cabeza a la tuya, de mi pecho a ti.
Y no me canso de quererte. A ti, que eres carroña.
No me canso de quererte, porque soy un buitre que se empeña en seguir una y otra vez rebuscando entre tus huesos, por si acaso aún quedara algo y no nos hubieramos dado cuenta. Por si acaso puedo devorarlo antes de que esté podrido, cuando te hayas ido.
Porque no me canso de quererte.
Y tú no sabes cuánto jode eso.
domingo, 31 de agosto de 2008
Maldito, maldito amor, cuando se va....
Hay días en que una cree que nada va a tener arreglo, que nunca vas a olvidar a aquel por quien sentiste tanto. Haces una lista de todas las cosas que no soportas de su persona, te recreas en todo el daño que te hizo. Pero eso no consigue que se vaya de tu piel, que se vaya de tu mente. Lo único que hace es que de pronto ccomiences a pensar que la culpa de todo es tuya, por no ser lo suficientemente guapa, por no ser lo bastante lista, por no estar a la altura. Y a desear con los ojos anegados en llanto, con el corazón roto y esparcidos los pedazos por toda la casa, que él vuelva con el rabo entre las piernas, a decirte qué idiota ha sido, como si tú no lo supieras. Y que el tiempo vuelva a poner su maldito contador a cero, y vosotros volváis a ser los mismos, como si nunca hubiéseis sido otros.
Pero entonces siempre hay una mano amiga que pronta acude a abofetearte hasta que callas los demonios, y una comienza a comprender que es él quien está podrido, quien no te merece, a quien debes odiar por encima de todas las cosas, para un día poder sentir sólo frío galcial al mirarle a los ojos. Aunque sólo sea porque llegue un día enque te sientas vencedora. vencedora de papel cuché, de tres al cuarto, vencedora de mierda. pero vencedora al fin y al cabo.
Y es que, aunque crea que lo que quiero es que vuelva a mí, humillado y sangrante, en realidad sólo quiero olvidarle.
Olvidarle.
Olvidarle.
Y que se vaya de mi vida para siempre...
Pero entonces siempre hay una mano amiga que pronta acude a abofetearte hasta que callas los demonios, y una comienza a comprender que es él quien está podrido, quien no te merece, a quien debes odiar por encima de todas las cosas, para un día poder sentir sólo frío galcial al mirarle a los ojos. Aunque sólo sea porque llegue un día enque te sientas vencedora. vencedora de papel cuché, de tres al cuarto, vencedora de mierda. pero vencedora al fin y al cabo.
Y es que, aunque crea que lo que quiero es que vuelva a mí, humillado y sangrante, en realidad sólo quiero olvidarle.
Olvidarle.
Olvidarle.
Y que se vaya de mi vida para siempre...
Suscribirse a:
Entradas (Atom)