Echo de menos tu risa compulsiva, tu mirada huidiza, tu relativizar las cosas.
Necesito tus consejos, tu aire fresco. Estoy condenada a una burbuja que amenaza con romperse a cada instante y me falta el aire, me falta hoy más que nunca, y deshoagarme, y me faltas tú, y tu soplo, y amenazan tantos cambios, y me siento tan extraña, y tan torpe, que desvarío y vengo a tocar a tu puerta sin permiso y sin vergüenza, y te pataleo y te lloro aún sabiendo que no es el sitio, ni el lugar, aún sabiendo que ya sabes cuánto te necesito.
Hoy estoy tan nerviosa, tan asustada, tan intranquila, que temo reventar antes de ver mañana.
Y te echo de menos. Creo que eso ya lo he dicho antes, pero es cierto. Es tan cierto...
Te echo tanto, tanto de menos, que no me lo tengas en cuenta.
7 comentarios:
Seguro que caerá pronto ese café pendiente, y esa cerveza derramada, con quien tú desees, bonica.
Un besito
Lo que ocupa la ausencia y la diluye es lo que el corazón requiere, como si le fuera la vida en ello, como cantaba Silvio Rodriguez.
Aquello cotidiano, es lo que construye el amor, luego aparece un poeta y lo hace cosmico.
Besos
"mañana es otro día"
fuerzas juls, aunque reventar no es tan malo de vez en cuando.
Me encanta leerte, Juls, ¡cuánta emoción, qué variedad de sentimientos reconocidos dentro de tí. eso te enriquece muchísimo y te hace más sabia, muuuuuucho más de lo que YA ERES.
Un abrazo grande :)
Echar de menos es necesario para darnos cuenta de que la vida continúa aún despues de su partida :)
Deja que la vida te amenace y luego vuelvela tu mejor lección.
:) Que alguien tan especial como tú, diga estas cosas de alguien ni remotamente tan perfecto como tú (porque es imposible ser tan genial...) es algo que siempre me remueve por dentro...
Te quiero amapolita (y al menos yo ya estoy de vuelta!)
Seguro que esa persona está contigo aunque no se tome ese café, además paciencia que llegará. Besos
Publicar un comentario