Es difícil decir lo que quiero decir
es penoso negar lo que quiero negar

mejor no lo digo
mejor no lo niego.

Mario Benedetti. "EL PUSILÁNIME",
de "El olvido está lleno de memoria".

domingo, 30 de noviembre de 2008

Mojo en el café

De qué sirve tener focalizado el objeto en mi punto de mira si alguien sin darme cuenta me ató los pies y las piernas al suelo, y ahora ya no puedo ni moverme?

Así que mojo en el café las ganas de todo lo que se ha quedado en el camino.

Mojo en el café las ganas de contar otras historias.

Y las ganas de vivirlas...

miércoles, 26 de noviembre de 2008

Palpar o...

Palpar.

Es eso, o abrir la mano y doblar los dedos juntos en forma de media concha, o en su defecto caracola tropical ribeteada en tonos nácar, y meter dentro un corazón glaseado y bañado en zumo de mora de perfumería francesa, que esta noche no ha parado de toser.

Y fingir que el tumor cardíaco no se hace más grande y no está desplazando una a una las costillas, y no va a acabar rematando el esternón, ni reventando en una nube de plumas de faisán de corral que están manchadas de trocitos de pedazos de fragmentos de partículas de aire azul celeste, y que hacia el celeste azul cielo se van volando.

Y coser tapices uno tras de otro, y descoserlos para puntear de nuevo un nuevo amanecer coloreado de nuevos hilos que de noche ya se han descolorido, y dejar un reguero de cicatrices y agujeros en la tela que si meto el dedo y escarbo cada día pueden ser más grandes, y con suerte y esfuerzo y dedicación pueden incluso dejarme caer dentro y bajar de golpe los tres estratos que me separan del suelo de verdad.
No éste de losa y tierra.
No de éste.

Y coger los bártulos y mudarme a la litera de arriba porque ya me cansé de tenerle miedo a los monstruos de debajo, y volver a coger los bártulos a la noche siguiente y mudarme de nuevo a la litera de debajo porque ya no tengo más ganas de temerle a las alturas. Como hago cada día.

Es eso, o palpar.

Palparte.

Palparnos.

Tu palma en mi palma y en la tuya la mía, y entre ambos rotundamente nada.

Otra alternativa no me queda.
Otra solución no encuentro.
Otra vida ya no tengo.
Otra cosa no me vale...

Es eso, o palpar.

Palparte.

Palparnos.

Tu palma en mi palma y en la tuya la mía, y entre ambos rotundamente nada.
Rotundamente nada...

El tiempo...

Las sábanas de mi cama las coloreó el silencio
la noche en que cerré los ojos
cansada de no verte,
y a las manos se les perdió el sentido
entumecidas
de tanto agarrar vacío.

La voz se me quebró en la boca
de llamarte a gritos
con el alma,
y en los oídos oculté tu nombre
ciego, mudo, sordo,
y carcomido.

Y el tiempo pasa y escribe de nuevo.
Pero el tiempo no puede traer
Lo que ya se ha ido.

El tiempo no puede escribir
lo que ya no ha sido.

Cuatro letras

La segunda vez que las cuatro letras de tu nombre ordenadas de la misma forma tocan a mi puerta y dicen “aquí estoy”. Y ya van dos de dos...

Y no tienes el acento hermoso, ni eres alto, y objetivamente tampoco guapo. Ni siquiera te esfuerzas en parecer simpático.

Son tus ojos color común, y tu nariz aguileña, los que se las apañan para que me sienta cómoda imaginando en mis manos la cucharilla de acero que mueve un café a medias.

No es nada en concreto.

Tan sólo es química, con tilde en la e....

;)

lunes, 24 de noviembre de 2008

Ni se te ocurraaaaaaaaaaaaa

¡Ni se te ocurra!
No te atrevas a crearme esta dependencia cuando nadie te dio derecho a entar sabiendo que no estás para cumplir!
Vete antes de que empiece a exigirte y no puedas darme nada de lo que necesito, vete antes de que me entretenga pegando martillazos a los muros que voy a ponerte para que no vuelvas a hacerlo otra vez.
Estás a tiempo de dejar las cosas como están.

Si no, aténte a las consecuencias...

domingo, 23 de noviembre de 2008

Ojalá me dolieras....

Basado en el Post de su mismo nombre, cuya fecha ahora no recuerdo....

;P

Muerte contigo!!

A qué tribunal he de acudir a demandarte por no haberme devuelto cada latido desacompasado que tiré contigo?
¿A qué vertedero tengo que ir para buscar entre basuras los pedazos de mentiras que me pinté en la cara y ya se me han borrado?
¿En qué comisaría puedo pararme para poner orden de alejamiento a tu recuerdo, que siempre viene en forma de flecha certera y envenenada?
¿Donde puedo firmar para volver atrás el tiempo y no conocerte nunca?
No conocerte nunca...
No conocerte nunca...
No conocerte nunca...


Realmente estás podrido.
Y apestas!

sábado, 22 de noviembre de 2008

De novias y compañeros de piso

Te vi ya el primer día y me pasó por el pecho ese algo que llaman x. Y sin embargo no le presté mayor atención porque tenía los ojos llenos de basura empapelada con lazo rojo.

Pasaron los días y siempre me prestaste mayor atención de la debida. Y yo apenas te hablaba porque hacerlo hubiera supuesto dejar salir cosas que por la circunstancias no tenían más remedio que quedarse dentro.
No tenían derecho a salir.
Nos conformamos con repetir posiciones e intercambiar rutinas cada día, con fantasear con los y si todo fuera diferente y aquí en lugar de él estuviera él, y en lugar de él estuviera yo.

Y cada día con mayor fuerza iba deseando cambiarme de sofá, e iba deseando ser destinataria de tus ojos de mendigo y tus abrazos de hueso, de tus partituras sacadas siempre cuando estaba yo delante, de tu cortesía regalada como metáfora de flores, y cada día con más fuerza me encerraba en un habitación acompañada sabiendo que tu pelo se ondulaba en otra tres cuartos más allá.
Y sé que a ti no te hubiera molestado rotar un puesto al dar las doce, aunque nunca me lo hubieras dicho.
Porque me lo ha dicho tu piel...

Y ayer me encuentras y vienes hasta mí, cuando pensaba ya que no existías y vivías fuera de mi ámbito de alcance, aunque conozca perfectamente el número de tu puerta, y apenas te recordaba, porque todo lo asociado a la basura hace tiempo que fue borrado a conciencia de mi armario. Pero llegas con el pelo más corto y cara de sorpresa, cara de no esperarme allí, de no volver a esperar verme nunca, como tampoco yo esperaba tenerte otra vez tan cerca. Nunca tan cerca, en realidad. Y me dicen tus labios obligados por tus ojos negros que te alegras de verme, que te alegras mucho. Y sonríes, y me hace sonreír. Y te fijas en mí cuando apenas nadie se ha fijado y me dices que me ha cambiado la nariz. E intentas consolarme echando sutilmente mierda de forma delicada sobre el recuerdo de una habitación totalmente impersonal, pero no nos importa, porque tú me estás mirando y yo te estoy mirando, y no te quieres ir, y yo no sé que hacer ni qué decir para que te quedes. Porque ambos sabemos que que te quedes no estaría bien, aunque sólo imaginarlo ya fuera fantástico. Y tú eres consecuente.
Y te alejas de mí sin perder el contacto de tus ojos con mis ojos, de ti conmigo.

Y te marchas.

Y el resto de la noche, ya sin ti, no me hallo.

Hoy no me hallo después de ti...

miércoles, 19 de noviembre de 2008

Sola

Nada me da más miedo que los ojos que miran sucio, que la voz que nadie escucha y ya no es bienvenida y no vuelve, y no le queda otra que vagar transparente golpeándose contra las paredes de ladrillo y cemento.

Nada me da más miedo que quedarme aparcada entre el hastío de cuatro paredes y una cama a la que siempre le sobra la mitad, aunque sea pequeña. Y no saber si este es mi sitio porque alguien se olvidó de dibujarme la marca, y yo lo necesito todo mascado y con notas a pie de página, y me pierdo entre las nieblas que yo misma creo soltando el vaho de mi boca preñada y triste.

Nada me da más miedo que acostumbrarme a este estado decrépito, que tirar la toalla al cajón de los trapos sucios, y resignarme a dejar vacíos los huecos que sólo llenan los tús.

Salvo seguir dependiendo tanto de la necesidad de huir de todos estos miedos.

Y es que los llantos no los ahogo en el agua.

La pena no se me quita fingiendo.

Y el corazón no deja de sentirse solo....

El lado oscuro

El lado oscuro del amor no es otro sitio que aquel en que quiero amarte y no puedo, aquel en que aprecio lo que eres y me esfuerzo en subvertir los sentimientos, y me lo impides, me lo impide todo, y sólo puedo mirarte a la mitad de lo que me gustaría, y sólo puedo sentir la sombra de lo que tu querrías.

No hay nada peor que vivir en el lado oscuro.

No hay nada peor que no poder sentir.

Lo siento.

Nunca lo pude evitar.

Despreciaba cada intento tuyo de hacerme risa, cada beso que sólo era saliva, cada comentario desafortunado, cada día que pasaba y me clavaba en la garganta la impotencia de saber que todas esas cosas jamás tendrían solución. Por mucho que yo te quise, siempre estuve contigo en le lado oscuro.

Y sin embargo, a ti te debo gran parte de lo que soy.
Para ti, en la boca no me caben bastantes GRACIAS.

Por las noches de conciertos con guitarra.
Por los dibujos que me hacías con tanto amor.
Por cambiarme por completo el modo de vestir.
Por la lista de canciones que sólo son contigo, a las que estás atado y con las que siempre vuelves.
Por que lejos de hacerme sentir mal por mi cuerpo, adoraras cada uno de los rincones que escondía mi piel láctea.
Por tu amor demostrado en forma de ensalada de pasta y cocina.
Por tu sinceridad aplastante. Por no tener miedo a mi reacción. Por primar siempre mi bien, sobre todas las cosas.
Por pensar en mí al andar por la calle.
Por tu forma de conocerme, de saber calmarme, de sermonearme, de darme en el clavo siempre.
Por las noches que sacrificaste con el teléfono para que yo durmiera sintiéndote cerca cuando estabas lejos. Con lo que lo odias.
Por tu ilusión de pasar la vida a mi lado, siempre.

Para siempre....

Cuánto me esforcé en amarte, en devolverte lo mismo. Cuanto insistí para que te abrieras a mí, pensando que yo estaba lista.
Y no lo estaba.

Cuanto luché por derribar tus barreras ,y la puerta grande, pensando que te quería. Pensando que amarte era pan comido.
Y no lo era.

Y me diste todo cuanto tenías y yo lo guardé sin poder usarlo.
Desperdiciado.

Lo siento muchísimo.

Yo quería amarte.
Yo quería sentir lo mismo.

Pero no pude.

No lo pude evitar.

Ahora estás con otra chica, y no sé ni cómo te va porque hace tiempo descubrimos que nos era imposible ser amigos. Porque tú me miras distinto aún. Porque no puedo evitar sentirme culpable a tu lado.

Ahora probablemnte seas feliz.

Ahora yo me quedo en las sombras, pensando como cada día si mi vida hubiera sido mejor si hubiera decidido pasarla contigo, pese a todo.

Si tanto sueño loco no me pasará factura.

Si algún día alguien podrá marcarme de la misma manera en que lo has hecho tú.
Aunque las respuestas nunca llegan.

Así que lo siento.

Te quise hasta la médula, pero en gris.
Te quise a rabiar, pero como amigo.

Nunca pude evitar el despreciar cada intento tuyo de hacerme risa, cada beso que sólo era saliva, cada comentario desafortunado, cada día que pasaba y me clavaba en la garganta la impotencia de saber que todas esas cosas jamás tendrían solución.
Que jamás podría amarte.

Por mucho que yo te quise, siempre estuve contigo en el lado oscuro.

Perdóname...

Yo no lo pude controlar.

Piercing....

Rompo la rutina de no mostrar imágenes mías para demostrar con pruebas que efectivamente esta soy yo, y que finalmente reuní el valor necesario para perforarme la nariz.


Pase lo que pase, no me arrepiento. Lo prometo....

lunes, 17 de noviembre de 2008

Al-f-onso Vegas

Siempre te miré directa y en contra de la costumbre contigo me cuesta mirar dos veces. O tres, o más.
Eres opaco y extraño, eres excéntrico y te rodea una nube negra que coges con alfileres porque te gusta que te acompañe. Con la otra mano haces pompas de colores.
Me da miedo mirarte a los ojos y ver que sufres. Prefiero quedarme a las puertas e imaginar que tu interior también está lleno de pompas.
Soy una cobarde.

Y sin embargo es tu forma de sentir y hacer sentir, es tu ser epecial, que a una misma vez te aparta y te acerca, es tu condena y tu premio. No sé como puedes levantarte cada día con tal carga de pesos opuestos y conservar la sonrisa o lucir la des-sorisa con tanta dignidad. Con tanta belleza.
No sé cómo puedes volver el existir a un vivir pleno cuando te lo propones, sólo con abrir las manos y dejar entrar.

No sé si serás feliz. No sé si puedes serlo.

Pero eres especial, no lo puedes evitar.

Así que aunque tus zapatillas de deporte no combinen bien, no dejes de escribir, pequeño saltamontes.
Y no escribas para nadie, salvo para ti.

Y para absolutamente todos los demás....

;)

Coris Julia, también llamado Doncella

Piso el terreno que se hunde por momentos cuando vengo de ser etérea y no pensar que aún existe gente como tú.


Y me topo con la dura realidad de que todavía existes, y lo que era sigue siendo y lo que soy será si no hago por dejar de serlo, y lo que eres por desgracia nunca cambia.


Y apunto en mi libreta los consejos que me da quien bien sabe darlos, y rezo porque llegue el día enque los automatice y me salgan de forma natural, y rezo por el día en que deje de estar el suelo lleno de barro, y por el día en que dejes de hacerle daño a ella, y por el día enque tenga el valor de decirte que ya no me interesas para nada, y por el día enque deje de hacerme daño yo, y por el día enque no haga falta un Dios , ni un cuento, ni nada más que sonreir y ver que todo está en su sitio.


Y es el mío el más bonito de los peces, y los colores y la plata no le impiden al coris julia que se lo coman los más feos que no pierden el tiempo en decorarse las escamas porque se ocupan ya en buscar presas y en devorar por trozos y editar fascículos en magazines con las visceras seccionadas en aparente actitud científica.


No necesito adoquines en las calles ni atardeceres que no amanezcan. Ni siquera necesito helado de nata y tarta de queso y dulce de leche cuando esté deprimida, ni bufanda ni gorro cuando el frío me hiele. Sólo necesito aprender a ponerte tope para fingir que soy democrática, y luego darte la patada tan fuerte como me den las piernas, y que no vuelvas nunca, y vayas a decir tonterías a quien le sobre tiempo que desperdiciar contigo.



Yo también empiezo mi cuenta atrás.


Contigo.


Conmigo.


Con el polvo de las lejas que me pongo de corbata.


Con los sueños que descarté por considerarlos a deshoras.


Sólo es cuestión de tiempo, y de ganas.


Y me sobran ambas.


Post

La luz reflejada en la piedra vieja.
El aire a humedad.
El corazón henchido.
El italiano en los oídos.
Lo que no me cabe en los ojos.
Sonrisas por todas partes.

No es Roma.

Sois vosotras....

miércoles, 12 de noviembre de 2008

Roma

Tantas veces he soñado con tenerte enfrente, Italia.... Y mañana a estas horas estaré bebiéndome tus calles, llorando con felicidad sin límites tus noches y tus días, y tus gentes, y tus ruinas, y tus óleos, y tu aire a vieja.

Veintidós años como cuenta atrás que en unas horas llegarán a cero, y BUM.

Por mucho que hoy me quiera morir porque me asfixia ser artista a tiempo total, mañana dejaré los pesos en tierra, y seré etérea.

Y seré romana...

martes, 11 de noviembre de 2008

Gracias a ti también...

Tú no lo sabes porque no estabas en los cuartos donde dormía yo, si bien uno de ellos lo conoces perfectamente bien.

Tú no lo sabes, pero siempre me interesaste, siempre hubo porción y media de ternura para ti cuando sólo eras una foto de una chica en un blog, cuando sólo eras la pobre niña que quedó en el camino cuando yo aparecí, la chica que supuestamente no llegaba a ser lo bastante buena para hacer de esposa en el teatro que sin comerlo ni beberlo nos hemos montado.

Tú no lo sabes, pero yo leí tu cuento una noche y no pude sino asombrarme y pensar que una persona que dice las cosas de tal forma a la fuerza tenía que ser especial.

Que una persona que ponía en su boca las cosas que yo no me atrevía a decir despertaba mi admiración. Me habría tomado un café contigo cualquier día, a cualquier hora. Sin conocerte. Aunque sólo fueras una sombra, aunque en el fondo te viera como una amenaza. Eras un enemigo digno, de esos que te matan y sonríes, pues nadie merece matarte tanto como él.


Y un día ocurrió. El resto de la historia la sabes porque es de las dos. La compramos en el rastrillo y la hicimos a nuestra medida y lleva nuestros nombres y la hemos pintado ambas, juntas, con el mismo pincel y los mismos colores, y tu mano y la mía se complementan para hacer un lienzo de difícil salida, pero que prometo no pedirte nunca. Y hemos trabajado duro para hacer la colada sin que nos destiña, y me ha costado quitarte la piel reseca de tu cuerpo.

Pero lo he conseguido.

Y mereció la pena...

Porque eres blanca y reluciente y cristalina, y tu cara es un poema, y tus ojos están vivos, y toda tú estás recién nacida y eres pura y virginal, aunque no lo creas. Y desprendes tanta luz que no te das ni cuenta, y es tan fácil sentirse bien estando contigo, y eres tan alegre cuando quieres...

Lástima que te esfuerces en ensuciarte con las sombras esa piel cristalina de polvo estrellado que te tocó en suerte. Es una lástima que pudiendo tenerlo todo libremente quieras vivir sólo con los cuartos. Es una lástima que no veas lo que eres y te esfuerces en ser algo que no te pega. Y es cierto que a veces eres mala y que te gusta serlo. Pero qué esperar de ti cuando tu víctima primera siempre eres tú...

Así que no te echaré la bronca.

Este post solamente es para decirte que sí, que yo también te doy las gracias por dejarte abordar. Que te doy las gracias por traerme aire fresco, que te doy las gracias por dejarme entrar en lo tuyo desde el principio, sin ninguna garantía de salir sin rasguños de una gata cornuda y herida.

Y que mis puertas están abiertas para ti y lo mío cada vez que quieras. Y que repito lo que te dije aquel día, en el primer taxi, la primera noche del primer encuentro.

Que será un placer quedar contigo, cada vez que quieras.

:)

lunes, 10 de noviembre de 2008

Eduardo..

Te vi justo cuando ya sólo te recordaba en la distancia muy lejana.
Y vuelves a decir cosas que no piensas, y vuelves a regalarme lo que nada te cuesta, y vuelves a tiritarme el cuello, y me desabrochas la camisa sin tocarme, desde lejos. Y repites los arrobos en mi cara, y el palpitar en todo el cuerpo. Con tu camisa de leñador.
Y me vuela la mente al nosotros, a las manos como bocas y a las bocas como cremalleras.
Te busca mi alma perdida e intenta por todos los medios echar la vista atrás y detener el tiempo en un pasado que ni a duras penas ya vuelve. Ni aún queriéndolo.

Porque me gustabas mucho.
Porque me gustas aún.

Pero yo ahora ya no soy la misma.
Y me guardo en el bolsillo el dedo que se muere de ganas de pulsar tu número. Por mucho que me gustes. Por mucho que me atraigas. Por muy sola que me sienta. Por muy guapo que te encuentre. Por muchas noches anotadas que se hayan quedado en el papel.

Ya no volveré a llamarte, porque ésta es una carrera de fondo, y yo no sé perder....

Así que me dejo la segunda persona-, y las ganas de usarla contigo, para cuando no la oigas...
Para cuando no necesite decirla, ni sentirla, ni tenerla al lado.

Me la dejo para cuando ya sepa usar el yo...

Veteeee!!!!!!!!!!

Qué ganas tengo ya de marcharme de esta calle que me tiene harta, llena de farolas como tú, que ni para dar luz sirven.

Estoy cansada de llevarte a ti y a las que son como tú a remolque, sólo porque estás muy ocupada pintándote la cara y no te deja tiempo para ponerte a pensar en cuál es tu verdadero problema. Te quedas mejor resguardada en tu victimismo estúpido y tu falta de criterio. Me tienes ya cansada de tus lágrimas de cocodrilo y tus cambios de humor, y tu necesidad continua de atención.

Bastantes problemas tengo ya yo como para solucionar los tuyos, estoy harta de que lejos de intentar aliviarme de vez en cuando me cargues con tus traumas de forma sistemática, y ni te des cuenta de que para mí supone un esfuerzo, un plus que ya se me está agotando.

Porque una cosa es que te quiera y quiera ayudarte, y otra que estar contigo suponga hacerte el camino para que no te duela mientras pasas.

Pues lo siento, lo siento pero hace tiempo ya que tus lágrimas no me conmueven, y la culpa la has tenido tú.

Así que vete, por favor.

Vete tú también...

sábado, 8 de noviembre de 2008

Rehabilitación

En plena terapia de rehabilitación me hallo sumergida, desintoxicándome de fugaces pieles sobre mis pieles, de sonrisas de tránsito guardadas a medio camino entre la boca y mis caderas. Curándome con parsimonioso victimismo de las formas verbales caducas y los trajes de noche siempre luminosos.

Duros son los comienzos, duro resistirse al objeto necesitado, duro vencer la carrera de la médula y el pulso acelerado que presiona el globo ocular. Duro hacer como que no me pone la carne de gallina la ansiada cercanía. Duro pasar el mono con gente, y aún más duro pasarlo sola.

Pero el premio es grande y pesa más que el aire, y toda dependencia con ganas desaparece, y todo cambio con esperanza se produce, y todo sueño con ilusión se cumple, y toda vida con amor se ensancha....

viernes, 7 de noviembre de 2008

Fin...

Hoy gasté tu bonobús, y no pienso recargarlo.

Nada nos une ya.

A mamá....

Que eres masculina donde las haya, que dar besos nunca fue santo de tu devoción y el cariño lo dejas disfrazado en los platos de la cocina.

Que tú y yo no nos entendemos desde nunca y sin embargo nadie me lee como lo haces tú. Tienes un sensor, acaso me colaste la otra mitad del microchip cuando me tuviste dentro.

Porque te peleas por nosotras ante cualquiera, porque te enorgulleces de mí como nadie, y no por eso dejas de tratarme con objetividad.

Porque en tu idioma me escribes cartas invisibles, cartas de amor del bueno, del que no me falla. Porque estas ahí siempre para evitar que salte, y estás para pegarme cuando me rompo.

Porque me gritas por tonterías, y sin embargo cada vez que he acudido a ti llena de vergüenza y desencanto has abierto los brazos a tu manera tosca, y me has rodeado por completo y has puesto soluciones a los caminos cortados, creándome otros o dándome la mano para saltar las vayas.

Porque estás dispuesta siempre a no cometer los fallos que cometieron contigo, porque te gusta aprender de tus errores y te esfuerzas cono nadie en ser cada día mejor persona.

Porque tienes esa forma de querer, y de venderte, que pasa desapercibida hasta que ya es tarde para valorarla.

Porque has sido capaz de crear con papá un bloque irrompible sin dejar por ello de ser tú, que hace que sienta que mientras no me faltéis vosotros todo tiene solución.

Y sin embargo nunca tengo el valor de decirte que te quiero. Ni siquiera tengo el arrojo para demostrártelo y tratarte como te mereces.

A nadie trato tan mal como a ti.

A nadie uso de la misma forma.

Nadie me hace sentir tan culpable.

Pero te quiero...

Y sólo espero que algún día sientas cuánto...

Ya no más...

No me cabe ya más nada en los adentros.
Algún día tendré el valor de decirme a mí misma que ya está, que ya no más de lo de siempre.

"Ya no más, por favor".

Deja de acabar contigo...

miércoles, 5 de noviembre de 2008

Si yo no me respeto... ¿Quién lo hará?

No nací para servir para vivir de estado gaseoso, por mucho que lo llene todo de humo, y por mucho que me crea que no se me encharcan los pulmones de este aire reviciado, por mucho que crea que lo puedo controlar y vaciarlo cuando yo quiera.

Yo nací para creer que es posible darle forma a las cosas y cambiar temperaturas con la mente y volver lo etéreo sólido, y volver lo negro blanco, sólo con mi boca, y con mis manos, y con mis ojos, y con mis labios. Sólo con atrapar el humo y encerrarlo entre los dedos, y apretar bien fuerte, y soltarlo condensado, y de colores, y real, y fiel, y vivo, y mío.

Sabes que sé que éste no es el camino, y yo sé tan bien como tú sabes que de seguir esta senda voy a acabar a las espaldas de donde salí, aún peor incluso. Tengo que centrarme y abstraerme y soltar las pesas y los lastres y quitar amarras, y dejar de necesitar y de pedir y empezar la casa por abajo, y sembrar buenos cimientos que florezcan sin plomo ni alquitrán en la parcela de hortalizas que me he comprado. Da igual si por un tiempo me alimento de patatas. Sólo quiero saber cómo hacer para cambiar las cosas, sólo quiero tener la guía para ser capaz de no perderme, y dar rodeos sólo cuando me apetezca...

Me siento tan perdida....

Es tan fácil desandar lo andado...

Es tan dulce llorar a oscuras....

No te aproveches de que aún no sé qué ropa visto. No me digas palabras que sabes no puedo resistir, ni me prometas que esta vez va a ser diferente y vas a compensar todo lo malo. No me hagas quererte de nuevo si te piensas volver a ir.
No me hagas creer de nuevo si no piensas volver a ser conmigo.
Sí. Tú. Yepes.
Y todos los demás.

No hay nada que puedas arreglar, salvo comprarme otro corazón nuevo y con olvido.
No hay nada que yo pueda hacer, salvo cambiarme de nombre y de vida y empezar de nuevo para cometer los mismos errores una y otra vez. Huyendo de los mismos, una y otra vez.
No hay nada que yo pueda hacer, salvo tramitar una orden de alejamiento contra mí misma y rezar para que tenga las agallas de cumplirla y tenga los cojones de marcharme a donde ni yo misma me pueda ver la cara de esposa sin marido que se me ha quedado.

Porque ni me respeto a mí misma, ni creo que merezca respeto. Y aunque sepa que todo lo que digo aquí y ahora no es cierto, y que valgo más que quien no me ve valer, me engaño a mí misma y me disfrazo de un todo vale y todo lo compesa, cuando en realidad es sólo que no tengo las agallas de plantarme frente al espejo y decirme a mí misma que no me están respetando.
Basta ya de usar los cristalinos sólo para disfrazarme los labios. Basta ya de tragar y tragar y tragar hasta la indecencia. Basa ya de justificar lo injustificable, de perfumar lo podrido en lugar de tirarlo directamente a la basura. Basta ya de buscar donde no me llaman y encima enfadarme con el mundo porque no me dió lo que pedí, habiéndolo exigido a deshoras y de malas maneras.

Éstas no son las formas.
Éste no es el contenido.
Así no se llega y nada se consigue.
Y lo sé.

Es sólo que me encuentro tan perdida...

Y es tan fácil desandar lo andado....

Y es tan dulce llorar a oscuras...

"Calle Asturias". Raya...

Sin duda el post por excelencia, el POST con mayúsculas, la palabra conjugada de forma inmejorable, el sentimiento goteando de las letras, el amor que mata y muere a la misma vez, el corazón a cien por hora al reelerlo, las lágrimas al borde del asomo, el Arte hecho verbo y el verbo siendo vida.
Todo lo que diga se te queda corto..... Y me lo ha regalado!!!!!!!!!!!!!

"Calle Asturias
No busques entre lineas palabras que no te pertenecen, porque si alguna vez te di mi nube, ella se disipó y te dejó ausente, duele el hueco que dejaste en mi cabeza, duelen tus horas de pensar en mi, duele de tal forma que tu dolor no deja de alegrarme, y no, ya mis estribillos no hablan de ti, y estas palabras ya han dejado de sufrir."

http://www.acordesmenores.wordpress.com/

Gracias.... :)

martes, 4 de noviembre de 2008

Guiño

"Un guiño es el día.
No sabe dónde meterse
cuando tu figura
despierta a mi vera"

Guiño es esto,
en esto nos hemos convertido,
en robarle la gracia a los minutos,
en parapetarnos tras los muros
para que nadie vea
que nos estamos compartiendo,
en ilegales hemos posado nuestra gracia.

Al final sólo quedan guiños
congelados en formol,
y promesas que no llegan,
pero que alegran.

Algún día
nos compartiremos.

Lascivia...

Antes de ti mi piel no servía
más que para tapar vísceras
y contener el aire.

Es sólo despés de ti,
y contigo,
que mi piel se vuelve viva
y además de envoltorio
tiene naturaleza propia,
y a su lista de funciones
se une ahora
ser recipiente de caricias,
contenedor de tu lascivia.

Lascivia-me
todo lo que puedas,
y hasta que no puedas más.

Lléname de ti,
y de lo tuyo,
entera.

Que me duelas la carne
aún después de ya no estar.

lunes, 3 de noviembre de 2008

"Algo". Second

Dentro del abanico de cosas rastreras que se pueden hacer, una de ellas es regalar canciones que han sido previamente regaladas, canciones que se dijeron cuando debían ser dichas porque significaban algo, y que aún significan una vez que se las ha llevado el viento.
Al menos ésta no me la han arrebatado...
Así por lo menos puedo usarla para esconderme bajo ella cuando nadie esté mirando....



"ALGO". Second.

"Recuerdo cada escena como si fuera de ayer, en este sillón,atado sin tener donde ir, ningún lugar, se me hace eterno.
Recuerdo cada día, todos han quedado bien en mi composición,atado sin tener donde ir, ningún lugar, se me hace eterno.
De nuevo veo capítulos con fragmentos que grabé,los tengo en mi mente cuando estás en ellos.
Y vuelvo a ser yo mismo, son lo único que hay,son lo que ahora tengo, por lo menos algo.
La historia terminó y nadie la vuelve a contar,se muere donde está.Lo he visto tantas veces, no quiero que pase más,no está pasando.
De nuevo veo capítulos con fragmentos que grabé,los tengo en mi mente cuando estás en ellos.Y vuelvo a ser yo mismo, son lo único que hay,son lo que ahora tengo, por lo menos algo.
De nuevo veo capítulos con fragmentos que grabé,los tengo en mi mente cuando estás en ellos.Y vuelvo a ser yo mismo, son lo único que hay,son lo que ahora tengo, por lo menos algo ...
por lo menos algo ...
por lo menos algo ...

Sólo quería mirarte por última vez,
sólo quería tocarte por última vez,
sólo quería mirarte por última vez,s
ólo quería tocarte por última vez,
son lo único que hay"


Qué fácil sería todo si...

Qué fácil sería todo con levantar el rabo y dejar que me olieras el culo, y olértelo luego yo a ver si somos afines, y que nos reconociéramos los iguales con los ojos, y con la nariz, y con las manos, y pudiéramos no perder el tiempo en la gente que no merece la pena, en la gente que menoscava nuestras defensas y sólo sirve para que disfracemos nuestro fracaso de un eterno aprender de lo vivido. Ojalá no fuera necesario, ojalá todo me fuera bien del primer día al último y lo único que tuviera que tener claro es que ser feliz es jodidamente fácil, y que sólo necesito latir sin límite y sin barreras autoconstruidas y sin miedos a las incertidumbres.

Que fácil sería todo si pudiéramos ser animales y cómo los animales sentir, si pudiéramos ahorrar el amor tirado a la basura e invertirlo desde un comienzo en fondos de interés y letras del tesoro que te devolvieran beneficios triplicados en forma de amor del bueno y del correspondido, sin lugar a dudas y sin riesgos de crisis.

Cómo cansa aprender para nada y creer encima que nos va a servir para algo, y fingir que realmente creemos que esa es la gracia de la vida cando cualquiera de nosotros firmaría desde ya la licencia para ser felices eternamente.

Cualquiera que no esté loco.

Lamentablemente somos muchos los locos...

domingo, 2 de noviembre de 2008

Farmacéutico...

Estimado farmacéutico:
Te he hecho entrega de la única papeleta para el sorteo cuyo premio gordo soy yo.
Ahora te toca mover ficha.
Aunque creo que ya sabes la que quiero que muevas...

sábado, 1 de noviembre de 2008

Yepes, exmargallón

No sé si te acuerdas de que al principio no eras nada salvo el gigante de la clase que se sentaba al final y que no abría la boca ni para pedir. No te descubrí hasta los 14. Yo venía de mi primera ruptura sentimental, o acaso aún estabamos empezando a empezar. La cuestión es que yo salía y entraba por momentos en el amor por excelencia de mi vida, (que tal vez algún día tenga un post), y tú salías y entrabas por momentos en la vida de aquella chica que jamás te mereciste y aún así te permitiste el lujo de apartar, aunque eso sería mucho más tarde.
Y tú y yo fuimos acercándonos poco a poco. Ambos tanteándonos las almas sin jamás haber juntado ni las manos ni las bocas. No nos hacía falta. Eras mi primer mejor amigo. Por aquel entonces creía que para que las cosas duraran sólo había que quererlo. Aún hoy lo defiendo. Y si no estás aquí conmigo ahora acaso sea porque no quisiste. Y el quizá es sólo una licencia que te regalo, porque hoy estoy llena de amor.

Sabes como yo que siempre te quise y siempre me quisiste. Que para mí fuiste el hermano que no tuve, fuiste un pilar al que siempre, absolutamente siempre, me asía cuando lo necesitaba, porque eres puro y eres fuerte. Y no porque fueras compresivo o me entendieras. Entre nosotros nunca hubo palabras porque los silencios nos llenaban más, y saber que eras y que querías ser a mi lado siempre fue suficiente para que no pasara un sólo día sin que te sintiera y supiera cuán importante eras para mí.

Superamos la distancia. Superamos el no vernos jamás. Seguías en mi ida y sin necesidad de decírmelo a cada instante yo sabía que seguía en la tuya.
No me moví de tu lado mientras estuviste en el hospital, y sólo dejaste que yo te diera el yogur, que yo te cuidara. Sabes perfectamente que jamás vas a poder vivir sin mí, sabes que me vas a llevar allá a donde vayas, porque eres tanto para mí como lo soy yo para ti. O éramos.

Sabes que pensabas en mí de forma indecorosa los días impares, y que yo lo hacía los pares, y que una vez al mes se juntaba el calendario y ambos nos rozábamos, y ambos estallábamos de ganas de cruzar la línea y ver qué se sentía estando los dos del mismo lado. Pero nunca lo hicimos, porque lo que teníamos era tan grande y tan blanco que jamás nos hubiéramos permitido mancharlo. Esa era la idea. La idea era que jamás dejaríamos de estar juntos, aunque amáramos a otros. Porque hay amores que no son incompatibles, ni necesariamente excluyentes. Y hasta que llegó ella yo creía que el nuestro era uno de ésos.

Ni tus novias ni mis novios jamás fueron obstáculo para ser amigos. Era requesito para estar conmigo que tú vinieras en el pack. Y ni siquiera tuve jamás que decir por qué. Entonces llegó la chica guapa y estúpida. Llego la niña malcriada y retorcida de cara preciosa. Y tú jamás te habías visto en nada igual, era tan jodidamente guapa que dabas gracias cada día de que se hubiera fijado en alguien como tú, no es así? Gracias a esa rata por querer estar contigo, que eres la persona más noble que he conocido en mi vida. Y esa rata dice que siente celos de tu relación conmigo. Y que es o ella o yo.

Sobra decir qué escogiste. Y sé cuáles son tus razones y no te guardo rencor porque en cierta forma las entiendo, van contigo y con tu situación. Pero me has partido el corazón, yepes. Me has hecho más daño que ningún hombre, porque tú eras más que todos. Fuiste mi primera gran decepción.

Y hoy te tengo que ver, y seguro que tú ni siquiera sabes lo que me dueles, seguro que crees que no te llamo y que he dejado de escribirte porque estoy ocupada. Seguro que crees que esto es pasajero o que soy tan comprensiva que te lo voy a perdonar. O a lo mejor en realidad te importaba tan poco que todo te da igual.

Así que dime, Yepes.
De qué me sirve que guardes mis cartas en un cofre si ya no las lees.
De qué me sirve pensarte si tú ya no me piensas.
De qué me sirve recordarte si lo que hubo ya se fue, y no quieres que vuelva.

Dime de qué me sirve escribirte todo esto si ya no hablas en mi idioma.
Dime de qué me sirve quererte, y cómo demonios consigo dejarte de querer....

Aunque seguro que no lo sabes.
Porque estás con ella y te ha prohibido responder.

Halloween & Día de todos los santos

Yo soy la chica de anoche que oculta por un traje ridículo se ahoga en alcohol servido en copa ancha, y que es incapaz de mantener el equilibrio ni los ojos abiertos, y que aún así se resiste a soltar la copa por temor a que se le pasen los efectos y tenga que volver a ver la vida como es, como la veía antes de salir, o mucho peor, que el alcohol generalmente lo deja todo frío, y sucio, y triste, cuando se va a ninguna parte.
Y sí, yo era ésa que siempre dijo jamás beberé porque no me gusta, y que anoche observaba a cuatro patas sobre el suelo lleno de meados lo abyecto que acaba de arrojar junto a una farola, y no era consciente y a la vez lo era, de que acababa de hacer lo que tantas veces repudia, y lo que juró y perjuró que nunca más haría. Vomitar.
Y la que llamó a quien no debía cuando menos debía, y firmó su sentencia de muerte sin lugar posible a apelaciones, porque ya no las quiero. Ya no me gustas.

Yo soy la chica que a un disfraz de demonio le añade la historia que le da la gana. Yo soy la mala conciencia que pone el veneno en la copa de las hermosísimas viudas negras. Yo soy el demonio que les sopla al oído lo que tienen que hacer, y cómo hacerlo.

Y a la mañana siguiente sólo soy la chica demacrada y decrépita que parece no haberse quitado el disfraz de muerta para ir a visitar a los otros muertos, como si fueran a estar realmente allí esperando a que acudamos en manada, como si de existir no estuvieran conmigo cada día, a cada instante...

Y soy esa misma que gira la cabeza y mira al suelo cuando tú pasas con los tuyos. Y tu madre no tiene otra maldita idea que decirte que ahí estoy, y a tí no te queda otra que venir a saludarme, y mi estrategia de fingida indiferencia, que se ha convertido en indiferencia real, se me cae a la basura y no me queda otra que saludarte como si aún te quisiera un algo...

Pero tú mereces un post para tí solo. Y allá voy...

La tercera persona del singular se conjuga sólo en femenino...

Es curioso cómo pasas de ser la pobre víctima que me inspiraba ternura a la hembra que se me coloca enfrente y me hace sentir torpe, frígida y sexualmnete inactiva. Sólo con decirlo. Sólo con pensarlo. Sólo conque yo me sugestione y me autoetiquete. Así me hiciste sentir la primera vez.

La segunda vez-primera parte (prealcohol) en cambio eras la pobre niña débil y falta de cariño que se sorprendía de descubrir que había sido desnudada en veinte segundos por unos ojos que ven a través de la ropa. La mujer fatal quedaba fuera de la mesa. Y no la eché de menos.

La segunda vez-segunda parte (postalcohol) toda la importancia me la guardé para mí, y para la ebullición de latires que me producía tenerte cerca, sabiendo quienes éramos y lo poco que pintábamos juntas. Nunca me planteé tener nada con una mujer. Y esa noche te hubiera comido la boca hasta hacerte sangre. ¿Será el alcohol?

La tercera vez sacas una nueva personalidad, o yo abro el ojo y dejo pasar otro de tus matices, y pasas a ser colega y amiga de toda la vida, y te camuflas y me haces sentir cómoda y te noto cómoda conmigo y lo mío...

¿Cómo puedes variarme tanto?
¿Qué hacemos ahora con todo esto?
¿Qué se te ocurre hacer conmigo y contigo?

Porque vendes contrastes y eres contraste en realidad, y no sé que parte hace que me atraigas tanto, si es la fascinación que ejerce la niña mala, que destilan tus palabras y tu forma de mirar, o la ternura de saber que en realidad de mala sólo tienes el nombre, y que lo que de verdad te importa te lo callas? ¿O será que creo que estás falta de todo lo que a mí me sobra y me nace pasarte todo mi excedente?
¿O será tu boca, simplemente?

Y al final siempre acaba habiendo un él entre nosotras, es imposible que salga del cuento donde ya no pinta nada. Qué pena que hayas tenido que ensuciar mi post con gente que no merece ni ser nombrada. Supongo que no se puede evitar. Al fin y al cabo no seríamos si no hubiese sido él antes. No me habrías mirado de no saber quién era yo, y probablenmete yo no te hubiera visto si no fueras quien él te ha hecho ser. Aún así, para mí ese él no va a quitarme más tiempo ni se merece más palabras. Sólo hago la excepción porque por ahora él es tú. Lo peor de ti, pero aún sigue ahí porque tú así lo quieres, y yo te apoyo porque a día de hoy compensas, pero trabajaré para borrarlo de entre nosotras cada vez que te tenga enfrente, y aunque no te tenga.

Porque tú por ti misma me importas desde ahora.
Y en este post sólo va a haber un ella.