Es difícil decir lo que quiero decir
es penoso negar lo que quiero negar

mejor no lo digo
mejor no lo niego.

Mario Benedetti. "EL PUSILÁNIME",
de "El olvido está lleno de memoria".

miércoles, 19 de noviembre de 2008

El lado oscuro

El lado oscuro del amor no es otro sitio que aquel en que quiero amarte y no puedo, aquel en que aprecio lo que eres y me esfuerzo en subvertir los sentimientos, y me lo impides, me lo impide todo, y sólo puedo mirarte a la mitad de lo que me gustaría, y sólo puedo sentir la sombra de lo que tu querrías.

No hay nada peor que vivir en el lado oscuro.

No hay nada peor que no poder sentir.

Lo siento.

Nunca lo pude evitar.

Despreciaba cada intento tuyo de hacerme risa, cada beso que sólo era saliva, cada comentario desafortunado, cada día que pasaba y me clavaba en la garganta la impotencia de saber que todas esas cosas jamás tendrían solución. Por mucho que yo te quise, siempre estuve contigo en le lado oscuro.

Y sin embargo, a ti te debo gran parte de lo que soy.
Para ti, en la boca no me caben bastantes GRACIAS.

Por las noches de conciertos con guitarra.
Por los dibujos que me hacías con tanto amor.
Por cambiarme por completo el modo de vestir.
Por la lista de canciones que sólo son contigo, a las que estás atado y con las que siempre vuelves.
Por que lejos de hacerme sentir mal por mi cuerpo, adoraras cada uno de los rincones que escondía mi piel láctea.
Por tu amor demostrado en forma de ensalada de pasta y cocina.
Por tu sinceridad aplastante. Por no tener miedo a mi reacción. Por primar siempre mi bien, sobre todas las cosas.
Por pensar en mí al andar por la calle.
Por tu forma de conocerme, de saber calmarme, de sermonearme, de darme en el clavo siempre.
Por las noches que sacrificaste con el teléfono para que yo durmiera sintiéndote cerca cuando estabas lejos. Con lo que lo odias.
Por tu ilusión de pasar la vida a mi lado, siempre.

Para siempre....

Cuánto me esforcé en amarte, en devolverte lo mismo. Cuanto insistí para que te abrieras a mí, pensando que yo estaba lista.
Y no lo estaba.

Cuanto luché por derribar tus barreras ,y la puerta grande, pensando que te quería. Pensando que amarte era pan comido.
Y no lo era.

Y me diste todo cuanto tenías y yo lo guardé sin poder usarlo.
Desperdiciado.

Lo siento muchísimo.

Yo quería amarte.
Yo quería sentir lo mismo.

Pero no pude.

No lo pude evitar.

Ahora estás con otra chica, y no sé ni cómo te va porque hace tiempo descubrimos que nos era imposible ser amigos. Porque tú me miras distinto aún. Porque no puedo evitar sentirme culpable a tu lado.

Ahora probablemnte seas feliz.

Ahora yo me quedo en las sombras, pensando como cada día si mi vida hubiera sido mejor si hubiera decidido pasarla contigo, pese a todo.

Si tanto sueño loco no me pasará factura.

Si algún día alguien podrá marcarme de la misma manera en que lo has hecho tú.
Aunque las respuestas nunca llegan.

Así que lo siento.

Te quise hasta la médula, pero en gris.
Te quise a rabiar, pero como amigo.

Nunca pude evitar el despreciar cada intento tuyo de hacerme risa, cada beso que sólo era saliva, cada comentario desafortunado, cada día que pasaba y me clavaba en la garganta la impotencia de saber que todas esas cosas jamás tendrían solución.
Que jamás podría amarte.

Por mucho que yo te quise, siempre estuve contigo en el lado oscuro.

Perdóname...

Yo no lo pude controlar.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Si no se está enamorada lo mejor es dejarlo, hiciste (o hizo quien sea) bien, pq siempre es mejor para los dos (y te lo digo yo q estoy en la parte del q me dejaron, pr eso me da la oportunidad d q alguien me quiere 100 por 100). El amor no entiende de medias tintas.. Seguro q te llegará.. besos